MI VOZ ESCRITA, Por Jorge Herrera
El actual síndico del Ayuntamiento del Distrito Nacional con las ínfulas de un Alcalde de verdad que no honra ni justifica, lo único que ha demostrado hasta lo indecible, es que no sirve ni para recoger basura.
La ciudad primada de las Américas, sin exagerar un ápice, es un vertedero que el de Duquesa le queda chiquito.
Sin embargo, como todo un farsante consumado, luego de que sus aspiraciones actorales se quedaran en el intento por mediocre, ese inservible, se hizo cómplice en un “fifty-fifty con un “ñame con corbata” que ingenuamente el doctor Salvador Jorge Blanco nombrara asesor financiero, y que se creyó Zar de las comunicaciones.
Pero en realidad, ese no es el móvil que anima mi inquietud. Lo que le interesa a este humilde y poco pretencioso articulista es destacar la poca vergüenza del bergante que hay detrás del seudónimo Roberto salcedo.
Ese espécimen, malagradecido sin par, que si tuvo la desfachatez de renegar de su propio nombre: Esmérito Salcedo Gavilán, ¿se puede esperar algo digno de él?
La fama que en su momento disfrutara Esmérito Salcedo se la proporcionó Freddy Beras Goico (+). No obstante, ¡Vaya paradoja! el segundo mejor humorista del país, en tanto lo de Rafael Tavárez Labrador, don Paco Escribano, es clase aparte, murió esperando que ese tunante, luego de llegar a la sindicatura del Distrito Nacional, le respondiera uno de sus requerimientos telefónicos, a pesar de denuncias públicas en sus programas.
La gente dice que el malagradecido debe estar muerto, pero se queda corta; los ingratos, no deben nacer. En definitiva, de lo que desgraciadamente la humanidad siempre ha estado falta, es de consideración, estima y solidaridad; sobre todo en estos tiempos, ya que la ideología que prima es la del dinero primero y después el dinero.
Esmérito Salcedo Gavilán (a) Roberto Salcedo algún día tendrá que entender que en este país los pendejos de que habla con propiedad incuestionable Arturo Uslar Pietri en su laureada obra “Oficio de Difuntos”, hace tiempo que pasaron a ser historia; que se fueron, como también se irán su pretensión y las de Danilo por sobre estimarse.
¡Ah Poder que hace cosas! Sería bueno saber, sólo para fines de record, al menos para mí, quién es el asesor de la campaña giga continuista del Gavilán Salcedo; pues, es inconcebible que alguien que pretenda seguir y seguir en un cargo electivo, se promueva como cambio.
Es lo más absurdo de la absurdidad.
¿O no?…
